FUMARIA |
FUMARIA |
El color de sus hojas suele ser verde grisáceo en la variedad que tiene las flores rosadas o rojas, y de color verde claro en la variedad de flores blancas. Sus semillas son unas diminutas bolitas de unos 2 mm. de grosor. Se cría en las zonas templadas de Europa (de donde es originaria), Asia y el norte de África, aunque hoy en día se encuentra difundida por todo el planeta.
La fumaria posee interesantes virtudes medicinales que a continuación les detallamos.
Es muy útil en los trastornos hepáticos por su propiedad de estimular la secreción de bilis o incluso de disminuirla si la persona así lo necesita. Mejora las jaquecas, falta de apetito o los vómitos cuando hay congestión o mal funcionamiento del hígado, incluso en casos de ictericia.
Es excelente para aliviar las digestiones pesadas y lentas, y además combate las posibles migrañas digestivas.
Con su efecto diurético y depurativo es aconsejable para las personas hipertensas, problema tan común en estos tiempos.
Al tener propiedades depurativas es una gran eliminadora de las toxinas que genera el organismo cuando hay problemas renales, hepáticos o intestinales, ayudando a mejorar los eczemas, sarpullidos y otras erupciones que aparecen en la piel en estos casos.
Las infusiones de esta planta se deben preparar a razón de tres cucharadas soperas de sumidades floridas por litro de agua y tomar tres tazas al día, una taza antes de cada una de las tres comidas.
No se deben prolongar los tratamientos con esta planta, deben ser cortos e intercalados con periodos de descanso.
Y sus infusiones siempre suaves y poco cargadas, pues su ingestión en exceso produce el efecto contrario al que se espera de esta planta.
Fotografías de José Romero.
SINONIMIAS
Francés: Fumeterre.
Inglés: Fumitory.
Alemán: Echter Erdrauch.
Holandés: Duiverkervel.
Italiano: Fumaria, fumosterno.
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